Comuna de Shinmin: La gran olvidada (II)

Por Dikastis
10 min. de lectura

Después de unas semanas aquí os traigo la segunda parte del primer artículo sobre la Comuna de Shinmin [del cual dejo aquí el enlace].

Para resumirlo un poco, en la primera parte hablé sobre los orígenes del movimiento anarquista en la península de Corea y su vínculo internacionalista con los anarquistas japoneses.

Kim Jong-Jin, el creador del “Manifiesto de la Revolución Coreana” se situaba como el artífice teórico del movimiento comunero y en 1929, se constituía definitivamente la FACK (Federación Anarco-Comunista de Corea), la cual, en Noviembre de ese mismo año, destina gran parte de sus recursos a impulsar una revolución en la zona norte de Corea.


OCUPACIÓN Y CREACIÓN DEL EJÉRCITO POPULAR

La zona en cuestión fue escogida porque sus condiciones materiales eran consideradas como las mejores para que se llevase a cabo una revolución triunfante. Entre esas condiciones nos encontramos:

  • La cantidad de planicies fértiles dispuestas como zona agrícola para el cultivo de arroz y maíz.
  • Que el terreno siempre había sido lugar de disputas, y en este caso, los japoneses pretendían hacerse con el control total de la zona con intenciones imperialistas.

Además, la región de Manchuria contaba con una gran cantidad de población exiliada (superior a 2 millones) de carácter rural, lo que daba lugar a una gran oportunidad para crear colectividades campesinas y garantizaba un acceso a la alfabetización y a la educación a los menores de 18 años.

La hazaña de liberación sería apoyada por viejos veteranos de guerra, entre los que se encontraba Kim Jwa-jin (también conocido como “Baekya”).

Baekya ya tenía antecedentes libertarios cuando a los 18 años quemó el registro de esclavos y liberó 50 familias.
Posteriormente, también destacaría su fundación de la Escuela de Hoyeong. Una escuela racionalista (basada en la pedagogía de Ferrer I Guàrdia y aplicada también en Makhnovia) destinada a los más marginados.

Tanto Kim como unos cuantos generales más del Ejército del Norte deciden erradicar este ejército para tomar partido en el Ejército de la Autodefensa en la zona liberada de Shinmin (la cual, a estas alturas, ya se había declarado como Provincia Autónoma y carecía de un Estado central).
El poder de los generales en dicho ejército quedó relegado a comandar la resistencia de los comuneros, ya que a la postre, serán estos el verdadero grueso de combatientes.

ORGANIZACIÓN COMUNAL

En Agosto de 1929 se constituye el primer órgano de decisión siguiendo el principio federativo, llamado “Asamblea para el Autogobierno de los Coreanos en Manchuria” (AACM).
Esta entidad permitió a los habitantes construir una organización descentralizada y federalista que fue aumentando su complejidad a medida que se iba estructurando.

Para la gestión de las relaciones intercomunales se requirió de la constitución de 3 niveles de consejos:

  • 1er Nivel: Consejos Municipales (por localidad).
  • 2º Nivel: Consejos Distritales (por conjunto de localidades).
  • 3er Nivel: Consejos Regionales (por conjunto de distritos).

Las juntas de decisión de cada consejo eran escogidas por sistemas de democracia directa.

Cada problemática que surgía requería nuevas administraciones para ser tratada de forma local en cada consejo. De esta forma fueron creándose, en función de las necesidades; Concejos de Agricultura, Concejos de Educación, Concejos de Asuntos Militares, Concejos de Salud…

Dependiendo de cada ámbito de trabajo se practicaron distintas formas de funcionamiento con la intención de solventar problemáticas laborales o productivas o planificar la economía y el aprovechamiento de los recursos (tanto bienes sociales como recursos naturales).
De esta forma, con sus más y sus menos, se consiguió autogestionar los servicios públicos y la agricultura.
También se avanzó tecnológicamente en la comunidad (con fondos recaudados mediante expropiaciones). Entre estos avances tecnológicos destaca la creación de molinos para procesar el arroz.

No quedaron registros esclarecedores sobre el papel de las mujeres en la comuna. Tan sólo existen referencias hacia su papel de contrabandistas de armas para el ejército popular y el de propagandistas administrativas.

Las estructuras sociales se fueron creando de forma apurada por la situación de guerra perpetua que les envolvía. Esto daba lugar a que no se produjera un proceso de experimentación y puesta en práctica adecuado para sostener políticamente una revolución social.

CAÍDA DE LA COMUNA LIBERTARIA

La praxis anarquista de la comuna empezaba a inquietar a la burguesía nacionalista japonesa y a los estalinistas coreanos.

Los bolcheviques se sentían amenazados por la AACM, concretamente por sus principios antiestatistas y cooptantes a las “bases populares” de estos.

Los comuneros de Yu Rim quisieron combatir a los estalinistas para evitar disputas futuras, mientras que los aliados de Kim Jwa-Jin sostuvieron que esa disputa sólo se llevaría a cabo, de ser necesaria, al conseguir la independencia de Shinmin.

El desencadénate de lo que viene a continuación lo encontramos el 24 de Enero de 1930.
“Baekya”, mientras ayudaba a reparar un molino, fue asesinado a sangre fría por un miembro de las Juventudes del Partido Comunista Coreano.
La respuesta de la FACK no se hizo esperar. Los militantes de la Federación repartidos por Corea, China y Japón se concentraron en la comuna, así como la totalidad de los recursos.

Paralelamente a la ofensiva desde el frente norte (flecha de arriba en la foto de cabecera del artículo), llevada a cabo por las tropas estalinistas secundadas por la URSS y el PC Chino (antiguo aliado de la FACK), se inició una ofensiva por el frente sur (flecha de abajo en la foto de cabecera del artículo), encabezada por las tropas imperiales japonesas.

Los estalinistas, ya en 1931, se infiltraron en la Comuna con la intención de asesinar a los referentes ideológicos de la FACK (entre los muertos, el más destacado es Kim Jong-jin), bajo el pretexto de que asesinando a los referentes – según los ellos, dirigentes – la comuna caería.

Pese a la incursión estalinista, los que tomaron, para 1932, todo el control de Manchuria, fueron los japoneses, que incluso nombraron al emperador Puyi como gobernante de la región.

Tras la caída de los últimos bastiones de la Comuna, en 1932, los militantes supervivientes tuvieron que huir debido a la persecución por parte tanto de los bolcheviques como de los imperialistas nipones.

Baek Jeong-gi trató de organizar un comando de liberación llamado “Cuerpos de Independencia de la Izquierda”, pero fue detenido por las tropas japonesas y encarcelado en una prisión de Nagasaki hasta el final de sus días, en 1934 y debido a una neumonía crónica.

Yu Rim, por otra parte, fue encarcelado 5 años, tras lo cual se exilió a China.
Años después participaría en combates durante la dictadura nacionalista de Corea del Sur.

El resto de militantes de la FACK fueron perseguidos (cuando no asesinados), mientras que el resto de supervivientes de las masacres del ejército japonés y de los bolcheviques volvió a sumergirse en una vida de esclavitud y desnutrición.

Empresarios japoneses empezaron a migrar instaurando desarrollo industrial, comercial y minero, volviendo así a un sistema de mercado esclavizante a costa de la mano de obra barata de los coreanos que allí se quedaron.

CONCLUSIÓN

A pesar de la corta duración de la experiencia comunera (30 meses, aproximadamente) no debemos pasar por alto la existencia de esta. Es necesario reivindicar su existencia histórica, sobretodo, debido al hecho de lo acallada que ha sido.

Es necesario, también, enfatizar el carácter progresista que tuvo y la capacidad que tuvieron los comuneros en gestionar casi de forma espontánea (teniendo en cuenta la atmósfera belicista que les rodeaba) los principales pilares de la sociedad.
Cómo, a medida que crecía la comuna y se asentaba la estructura, iba avanzando y desarrollando el modelo federal hacia formas más complejas y cómo priorizaba una tarea tan imprescindible para cualquier sociedad como es la educación, aplicando un método educativo muy superior a los de la época (rompiendo la dicotomía entre escuelas militares-estatistas y escuelas religiosas).


Bibliografía:

  • Revolución anarquista en Corea – Emilio Crisi
  • El anarquismo en Corea – Hwang Dongyoun
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